Las buenas ideas son siempre bienvenidas, cuando se trata de preparar y cuidar tu huerto lo mejor posible, sobre todo ahora, que viene el frío y el mal tiempo. Aquí te dejamos estas 5 ideas. Por supuesto, te seguiremos dando más a lo largo de todo el invierno. Atención con estas buenas ideas:
1 A LOS FRUTALES, PODA INVERNAL
Cuando ya no queden frutos en las copas de ciruelos, guindos o granados por ejemplo, es el momento de retocarlos con la herramienta de poda. Se trata de despuntarlos y eliminar las ramas más viejas y desgarbadas con el fin de que puedan formarse renuevos. Aprovecha cada año para renovar las copas suprimiendo las ramas menos productivas. Eso sí, con cuidado, porque si podas demasiado te quedarás sin frutos.
2 LEVANTA DEL SUELO LAS CEBOLLAS Y GUÁRDALAS
A estas alturas del año, los bulbos de las cebollas habrán engordado y el follaje comenzará a amarillear y secarse. Toca sacarlas del suelo y almacenarlas. Hazlo con la ayuda de una horquilla y habiendo humedecido el suelo un poco antes. Una vez fuera, deja que se sequen bien al sol las pieles exteriores y guárdalas en cajas de madera o bien forma ristras con ellas para colgar. En un sitio ventilado y sin heladas pueden durar de 3 a 6 meses en perfecto estado.
3 ¿QUÉ VENTAJAS TIENE CUBRIR LOS TALLOS?
Hay cultivos que aguantan bien las bajas temperaturas. Es el caso de puerros, zanahorias o hinojo, por ejemplo. Sin embargo, amontonar tierra alrededor de sus tallos les ofrece una protección extra cuando más bajan las temperaturas. Asimismo, esta técnica llamada aporcado o recalzado tiene otras ventajas: mantiene sujetas las plantas, evita que se acumule agua en sus cuellos y, si la haces unos días antes de la cosecha, saldrán más tiernas.
4 TRAS LA COSECHA, ACOLCHA LAS VIVACES
Los cardos, espárragos, fresas, tupinambos o ruibarbos son hortalizas estables o vivaces que se extinguen cada otoño para rebrotar al año siguiente. Pues bien, ahora les viene de lujo un acolchado. Primero, corta los tallos muertos por la base y deshazte de las hojas más feas. Luego esponja el suelo con ayuda de una horca, de modo que la humedad de la lluvia pueda filtrarse bien. En el entorno de cada planta coloca una capa de unos 5 cm de espesor de compost bien descompuesto. Procura que llegue hasta unos 45 cm con respecto del cuello para que cubra toda la extensión de las raíces.
5 ¿QUIERES TENER AJOS? ¡PLÁNTALOS AHORA!
El ajo es una de las especies más preciadas y utilizadas en la cocina. Por eso, seguro que te gusta cultivarlos en tu huerto. Aprende la técnica y no tardes mucho en plantarlos para poder disfrutarlos el próximo verano.
- Cava el suelo en profundidad para dejarlo ligero, permeable y rico en humus.
- Haz las separadas 30 cm y acomoda los dientes a 20 cm de distancia unos de otros. Instálalos con la punta hacia arriba y dejando que sobresalgan un poco.
- Apenas requieren riego salvo al inicio de su desarrollo, y tampoco se recalzan ni hay que agregarles abono.
Si quieres saber más tareas que mantendrán tu huerto perfecto y a salvo del frío, no te pierdas el número 289 de tu revista Mi Jardín. Para conseguirlo, llámanos al 916326251 o escríbenos a suscripciones@revistamijardin.es