Los arbustos y los setos son elementos imprescindibles en cualquier jardín con un diseño armonioso. Los arbustos aportan sombra, son ornamentales y, bien cuidados, resisten años. Por su parte, los setos ayudan a delimitar el jardín y dotarlo de intimidad, pero también son útiles para protegerlo del viento y del calor, así como para crear diferentes ambientes.
Cómo plantar tus setos, paso a paso
- El mejor momento para hacerlo es el otoño o la primavera.
- Prepara el terreno, eliminando hierbajos y restos de plantas secas, y removiendo la tierra para dejarla esponjosa y suelta.
- Cava una zanja recta, ayudándote de una cuerda y con una profundidad aproximada de 40 cm.
- Mezcla la tierra extraída con abono orgánico (mantillo, estiércol, humus de lombriz…).
- Coloca las plantas dejando suficiente espacio entre ellas, algo que dependerá del tipo de especie que hayas elegido.
- Rellena con la tierra extraída y abonada y riega de forma abundante durante los primeros días para mantener la humedad del terreno.
¿Qué especies elegir?
La amplia gama de arbustos y especies para setos, en ocasiones, complica la elección. Son diversos los aspectos que debemos tener en cuenta antes: el tamaño del jardín, la altura máxima que alcanzarán las plantas y su velocidad de crecimiento, el clima y el tipo de suelo, así como qué tipo de planta buscamos (hoja caduca o perenne, con floración o sin ella). Después de valorar todas estas cuestiones, deberíamos reflejar en un papel el diseño de nuestro jardín y la distribución que queremos hacer tanto de los setos, como de los arbustos. Teniendo en cuenta todo ello, algunos de las especies más apropiadas para un seto bajo son el boj, la lonicera, la fotinia nana o el berberis. Para un seto de altura media: evónimo, laurel, camelia, tuya, fotinia o espino albar. Para un seto alto, ciprés, haya, carpe o laurel real, entre otras. Respecto a los arbustos, el cerezo de flor, manzano ornamental, arce japonés, madroño, mimosa o árbol de júpiter son buenas opciones para jardines medianos. Por supuesto, las rosas también son una especie que se adapta muy bien y destaca por su gran valor ornamental.
La poda del seto, el cuidado más importante
El objetivo de la poda es, además de darles forma, conseguir un follaje denso y fuerte. Entre abril
y mayo tendrás que realizar la primera poda. A principios del otoño, hay que realizar otra. Y en verano pueden necesitar algún repaso. Cuando el seto está en desarrollo y quieres conseguir una pantalla recta, conviene utilizar cuerdas o alambres de guía. Además, para que la poda quede perfecta, no dañe a la planta y no sea un trabajo muy laborioso, necesitas un buen cortasetos. EasyHedgeCut 18-45 de Bosch es una tijera cortasetos con batería (de 18V), de peso ligero y con el sistema anti-blocking para cortar sin interrupciones. La longitud de la cuchilla es de 45 cm y la abertura entre los dientes de 15 mm para trabajos ligeros de corte.
Poda de rejuvenicimiento
La poda de rejuvenecimiento puede ayudarte a salvar tus ejemplares si se han hecho viejos o los has abandonado durante años. Esta poda tiene el objetivo de eliminar las ramas viejas y enmarañadas. El mejor momento para hacerla es el otoño, cuando las plantas entran en reposo por el frío. Según el estado de la planta, quizás sea necesario cortar al ras del suelo o dejar sus ramas a 40-50 cm. Otra opción es cortar el 50% de las ramas, a ras de su inserción. Después de cualquier corte, conviene regar y abonar la planta. Importantísimo para esta y cualquier tipo de poda: que las herramientas estén bien afiladas.
Para las ramas más altas Bosch propone la sierra UniversalChainPole 18 con barra telescópica que te permitirá llegar sin esfuerzo a ramas difíciles. Su diseño ligero y ergonómico minimiza el esfuerzo de
brazos y hombros. Además, cuenta con protector de cuchilla y dientes parachoques para mejorar el control al cortar por encima y por debajo. Y para eliminar las ramas más gruesas, UniversalChain 18, ligera, compacta y versátil, solo pesa 3 kg incluyendo la batería. Esta herramienta, además, te permitirá cortar leña y residuos pasando de una opción a otra fácilmente. Cuenta con protector de cuchilla con dientes de agarre para realizar cortes limpios desde abajo con un daño mínimo en la rama. Ambas funcionan con batería de 18V.
Recicla los desechos de la poda
A lo largo del año, en el jardín se generan bastantes residuos: ramas de las podas, recortes de hierba de la siega del césped, las hojas secas de los árboles, plantas muertas, etc. Puedes optar por llevarlas al punto limpio o por reutilizarlas. Los recortes del césped se pueden dejar sobre el suelo, ya que con el tiempo se descomponen y se convierten en nutrientes para el terreno. Con ayuda de una biotrituradora puedes desmenuzar las hojas secas y las ramas podadas y convertirlas en mantillo para alimentar el suelo y proteger las plantas de la maleza y la deshidratación. Además, te animamos a realizar tu propio compost, incorporando también los residuos orgánicos de la casa.
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