El proyecto que desarrollamos en el colegio concertado La Milagrosa (Llodio, Álava), recibe el nombre de «Cultihuerta: cultivando cultura». Con esta iniciativa se trabaja en todas las etapas educativas de nuestro centro escolar, es decir, desde Educación Infantil y Educación Primaria hasta la ESO.
El uso de materiales reciclados, como se observa en las fotografías, es un aspecto muy importante para nosotros. Tienen el interés de que damos una segunda vida a muchos materiales que, a través de la restauración, podemos seguir utilizando como neumáticos, palés en diferentes formas, etc.
Los objetivos del proyecto del CEIP La Milagrosa
El proyecto de la «Cultihuerta» nace con el objetivo principal de ampliar las posibilidades de aprendizaje del alumnado al permitir la puesta en práctica en el huerto de los conocimientos teóricos previamente adquiridos en el aula, así como la incorporación de nuevos conocimientos que ofrece la relación con el medio natural. Este proyecto aporta a nuestro colegio un recurso educativo innovador, ofreciendo a los diferentes agentes involucrados en el proceso educativo (alumnado, profesorado y familia) un “laboratorio natural y vivo” en el que experimentar y aplicar los conocimientos.
¿Qué beneficios tiene?
Consideramos que la disponibilidad de un huerto aporta múltiples ventajas a distintos niveles, tanto para alumnos y profesorado, como para el centro educativo. A continuación, mencionamos algunos de los beneficios directos que tendrá el presente proyecto sobre los principales agentes involucrados:
• Para el alumnado:
– Toma de contacto con la tierra y la naturaleza a través de las diversas tareas que se realizan en el huerto escolar.
– Sensibilización y concienciación por la importancia de la conservación de la naturaleza.
– Adquisición de aprendizajes a través de la observación de los procesos naturales.
– Desarrollo de nuevas capacidades.
– Iniciación en el conocimiento, cuidado, aprovechamiento y consumo responsable de los recursos que ofrece el medio natural.
– Conocimiento de los procesos de producción y el origen de los alimentos del huerto a través de la participación activa.
– Puesta en práctica de conocimientos teóricos a través de experiencias en el huerto.
– Incorporación de nuevos aprendizajes útiles para su vida cotidiana.
– Adquisición de nuevos aprendizajes para poder cultivar sus propios alimentos.
– Participación en dinámicas que fomentan el autoconsumo y la alimentación saludable.
– Asimilación de principios de colaboración y trabajo en equipo.
– Desarrollo integral, tanto a nivel cognitivo, afectivo y motriz.
– Participación activa en procesos educativos en torno al huerto.
– Conocimiento del ciclo natural de las plantas adquirido por la observación real del mismo.
• Para los docentes:
– Acceso a un recurso alternativo e innovador con el que dotar a sus sesiones de un carácter más práctico y experimental.
– Posibilidad de programar dinámicas en el huerto que despierten la motivación, faciliten, y enriquezcan el aprendizaje del alumnado a través de dinámicas que les permita poner en práctica conceptos teóricos.
– Transferir y transversalizar conocimientos de las diversas áreas curriculares al huerto, a través de procesos de enseñanza-aprendizaje significativos, que permitan al alumnado establecer relaciones entre la teoría y la práctica de modo vivencial.
– Acceso a un nuevo escenario donde poder poner en práctica las bases de la resolución de conflictos que se establecen en la normativa internacional, posibilitándose una mejora en la convivencia entre los diferentes agentes involucrados (alumnos, profesores, familia).
• Para el centro educativo:
– Mejora del entorno y de las infraestructuras.
– Mejora de la oferta educativa.
– Equipararse a otros centros de enseñanza que ya cuentan con un recurso similar.
– Contar con un recurso educativo innovador y con gran potencialidad que le permita mantenerse actualizado en base a las tendencias sociales y educativas actuales.
¿Qué impacto tendrá el proyecto?
El proyecto que se presenta, al igual que todo proyecto social que se lleve a cabo, tendrá determinados impactos en el contexto en el que se implemente. Hay que tener en cuenta que la disponibilidad de un huerto en el centro escolar no solo tendrá un impacto directo en el alumnado, profesorado, y en el propio centro, si no que además debe considerarse el impacto que se genera, tanto a corto como a largo plazo, en otros agentes involucrados como son la familia, y la sociedad en última instancia.
Impactos a corto plazo:
– Fomento de la cooperación y colaboración entre alumnado, profesorado y familias.
– Fomento del trabajo en equipo tanto para alumnado como para profesorado.
– Implementación de nuevos conocimientos de los distintos agentes involucrados a través de las relaciones entre diferentes generaciones.
– Intercambio cultural.
– Fomento de alternativas de ocio y tiempo libre relacionadas con el medio natural.
– Fomento de la observación participante como método de aprendizaje.
– Promoción de la participación activa del alumnado.
– Concienciación sobre la importancia de la agricultura.
– Sensibilización por la agricultura y horticultura sostenibles.
Impactos a medio/ largo plazo:
– Fomento de una cultura de consumo alimentario saludable.
– Promoción de una ciudadanía responsable.
– Promoción de los valores de sostenibilidad y autoconsumo.
– Concienciación hacia el consumo responsable.
– Promoción de la agricultura como alternativa de vida.
– Revalorización de las tradiciones.
– Promoción de dinámicas de consumo de producto de cercanía.
– Facilitar el relevo generacional en el medio rural.
– Empoderamiento de los principales agentes involucrados.
Localización del CEIP La Milagrosa Ikastetxea
Colegio La Milagrosa Ikastetxea
Calle Letziaga Bidea, 2, 01400 Laudio, Araba