¿Qué necesitan los semilleros del huerto para tener unas plantas sanas? ¿Dónde hay que ponerlos?¿Qué tierra necesitan?¿Cuánto hay que regarlos? Si te has planteado alguna vez estas preguntas estás en el buen camino de tener un huerto exitoso. De la mano de nuestros amigos expertos de Cultivarte Agroambientales, te ayudamos a resolver todas estas dudas.
Por qué es buena idea crear semilleros en tu huerto
Quien quiere un huerto ecológico hecho por sí mismo querrá, tarde o temprano, obtener las plantas de sus propias semillas. Cuidar las plantas desde que nacen es una de las experiencias más reconfortantes del huerto. Además, hacer semilleros permite planificar mejor el huerto, escalonar los cultivos y diversificar el origen y las variedades de hortalizas.
EL SUSTRATO
Debe ser rico en materia orgánica, que drene bien y que mantenga la humedad. En el mercado hay muchas posibilidades de sustratos especializados para esto o para huerto. También puedes hacerlo en casa mezclando los ingredientes. Hay muchas posibilidades, te damos nuestra receta:
- 40% fibra de coco: es un sustrato que tiene grandes capacidades de retención de agua a la vez que permite una buena aireación de las raíces, presenta un pH apropiado para muchas plantas y tiene una capacidad de intercambio catiónico elevada. Además, tanto su obtención como el residuo que genera son sostenibles.
- 50% compost: Un alimento equilibrado para las plantas y, por definición, natural. Podría sustituirse por humus de lombriz pero en cantidades sensiblemente más bajas.
- 10% perlita + vermiculita: estos elementos minerales mejoran la capacidad de retención de agua del sustrato y la aireación. Además ayudan a la absorción de nutrientes por parte de las raíces.
EL RECIPIENTE
Tradicionalmente, se reserva un espacio protegido y soleado en el huerto, y es ahí mismo donde se hace la siembra protegida para el posterior trasplante. Pero esto no siempre es posible y hacerlo en un recipiente permite mejorar el sustrato, controlar mejor las plantas (tanto las sembradas como las hierbas silvestres) y, en caso de ser en bandejas de alveolos, evita daños en las raíces. Hay muchas posibilidades de recipientes para comprar, pero también hay muchos materiales que se tiran a la basura que sirven de recipiente. Los recipientes para semilleros más comunes son:
> Bandejas de alveolos
Normalmente de plástico, ahora también se venden de materiales orgánicos que luego pueden compostarse. Son cómodos de trabajar y permiten ahorrar en sustrato. A la hora del trasplante, las raíces sufren menos. Ahora bien, al estar el sustrato más expuesto, es necesario prestar mucha atención al riego.
> Bandejas de poliestireno, poliespán…
Son las típicas bandejas de “corcho blanco”. En las fruterías y pescaderías se tiran habitualmente bandejas que, practicándoles unos agujeros en la base para permitir el drenaje, sirven de maravillosos recipientes de semilleros. En este caso, hace falta más sustrato, pero se mantiene mejor la humedad.
> Otros materiales reutilizados
Los envases de yogur, cajas de madera, hueveras de cartón… generamos mucha basura que podemos reutilizar y evitar generar más. La única condición es que mantenga la humedad, drene el exceso de agua y tenga una profundidad mínima de unos 5 cm.
EL EMPLAZAMIENTO
Como todas las plantas del huerto, los semilleros necesitan sol directo, es decir, para que nos entendamos “el sol tiene que tocarles”. Lo ideal es que tengan unas 5 horas al día de sol directo. Pero también necesitan calor. Si ya se han ido los fríos del invierno, podrás ponerlos en la calle, pero en caso de que aún haga frío, deberás tenerlos en lugar protegido. En caso de ponerlos dentro de casa, busca la ventana que más sol tenga al día y pon los semilleros lo más pegados a ella posible y evitando cualquier sombra (incluso la del marco de la propia ventana).
EL MOMENTO DEL TRASPLANTE
Como norma general, se considera que están en el momento de trasplantar cuando las plantas tienen 3 o 4 hojas verdaderas, es decir, las que tienen la misma forma que las que tendrá cuando la planta sea adulta (si no conoces esto, busca la diferencia entre cotiledones –las primeras hojas de muchas plantas– y las hojas verdaderas).
Si las plántulas pasan demasiado tiempo en el semillero corren el riesgo de estresarse y sufrir daños que afectarán al resto de su crecimiento.
En caso de que hayan crecido mucho y no haga aún temperatura para llevarlas al huerto, te recomendamos que las trasplantes a macetas más grandes (esto se llama repicado).
EL ORIGEN DE LAS SEMILLAS
Pese a la gran calidad de las semillas comerciales, muchas de estas no están adaptadas a los climas en los que vivimos y/o tenemos nuestro huerto. En cambio, las semillas o variedades que se han cultivado durante siglos (quizá milenios) en un mismo lugar tienen muchas más posibilidades de estar adaptadas al clima, las plagas y las enfermedades de dicho lugar. Te aconsejamos que investigues entre tus familiares, vecinos, en el pueblo o barrio… y que trates de cultivar variedades tradicionales de la zona. Hay bancos de semillas, proyectos de recuperación, intercambios… Con esto, además de tener un poco más asegurado el éxito de tus semilleros y tu huerto, estarás colaborando con el mantenimiento del legado de generaciones de hortelanas y hortelanos que llevan siglos cultivando e intercambiando semillas y saberes.
Información de Cultivarte Agroambientales
Puedes encontrarles en los huertos escolares de la sierra noroeste de Madrid. www.cultivarteagroambientales.es
Si quieres saber más sobre huertos urbanos, no te pierdas el número 285 de tu revista Mi Jardín. Para conseguirlo, llámanos al 916326251 o escríbenos a suscripciones@revistamijardin.es
