Por Monique Briones, ingeniera agrónoma y paisajista
Como paisajista y jardinera que soy, me gusta tener el jardín siempre espectacular. Cada parte de mi jardín personal fue diseñada pensando en un distinto tipo de actividad para desarrollar en él. Las zonas con césped para los juegos y el descanso, los setos para la privacidad, y los parterres de flores para el colorido y el aroma. Llegada esta época, son distintas las tareas de mantenimiento que nos pide cada jardín, pero sin duda la que más disfruto es la renovación de parterres. De hecho, tengo uno que funciona como “laboratorio y maternidad”, que da cobijo a nuevas plantas cada año que pasa, es un sitio de prueba.
En este espacio puedo testar que plantas funcionan bien en nuestro clima y cuáles no. Lo que más me emociona es la hora de mover las plantas que funcionan a su hogar definitivo y volver a empezar, para lo cual siempre cuento con una motoazada, ya que me facilita inmensamente la labor de mover y preparar el terreno muy compactado. El modelo TF 225 de Husqvarna es perfecto para mí, por su tamaño adecuado y peso ligero. ¡Es una gozada no depender de ningún jardinero aparte de mí misma!
Jardines con Alma-La Paisajista
