Si en el anterior número de Mi jardín y en el último post de esta sección hablábamos sobre los principales tipos de plantas de interior decorativas, aquí indagaremos sobre sus nombres y qué nos dicen… Toda esta información nos permitirá conocer las necesidades básicas para su cuidado y, a la vez, cultivar nuestro vínculo con ellas. Por Eva Creus.
La primera toma de contacto con tus plantas
En mis talleres de jardinería en macetas para la salud y bienestar integral de las personas (no importa si van dirigidos a niños, jóvenes, adultos o personas mayores), el primero de mis objetivos es fomentar en los participantes una actitud de curiosidad y fascinación ante las plantas con las que interactuaremos ese día. Al fin y al cabo, se trata de ayudar a despertarles esa conexión innata con la naturaleza que todos tenemos. Sin esta conexión, es muy difícil que se genere un sentimiento de cuidado y, menos aún, un vínculo emocional con las plantas que van a formar parte de nuestro jardín de interior.
Así que siempre insisto en la necesidad de formularles a nuestras ‘plantitas’ (es así como
me gusta dirigirme a ellas) al menos estas dos preguntas: ¿Cómo te llamas? y ¿de dónde vienes? Porque, ¿verdad que no se nos ocurre establecer una relación con alguien sin conocer al menos su nombre y lugar de procedencia?
Lo que hay detrás de cada nombre
En general la gente se queja de la imposibilidad que tiene a la hora de memorizar los nombres botánicos de las plantas más habituales. De acuerdo, algunos nombres son larguísimos y casi impronunciables, pero muchos nos aportan información clave sobre las características básicas de la planta, como el color, tamaño, hábitat, tipo de crecimiento o forma de multiplicación, incluso su país de procedencia. Toda esta información nos servirá para procurarles los mejores cuidados, escoger el mejor emplazamiento, decidir si agruparlas o dejarlas en solitario, etc.
Es más, al conocer el nombre asignado a cada planta estaremos potenciando capacidades que van debilitándose con la edad, como la atención, la memoria y la capacidad de aprendizaje, ¡y sobre todo nos ayudarán a mantener viva nuestra curiosidad y fascinación por el mundo natural!
El DNI de cada ejemplar
En el siglo XVIII, el botánico y zoólogo sueco Carlos Linneo estableció el sistema binomial de clasificación de los seres vivos (conocido como taxonomía). Gracias a este sistema, cada planta se designa con un único nombre formado, en primer lugar, por su género y a continuación, su especie, como si del nombre y el apellido se tratara: Aloe vera, Monstera deliciosa…
A continuación, te ofrezco unos cuantos ejemplos que te servirán también para que vayas aprendiendo el nombre de unas cuantas plantitas que pueden quedar preciosas en tu jardín interior:
Triangularis: Hojas triangulares.
Ejemplo: Oxalis triangularis
Arboricola: Crecimiento arbóreo.
Ejemplo: Schefflera arboricola
Floribunda: Mucha floración.
Ejemplo: Stephanotis floribunda
Scandens: Que trepa.
Philodendron scandens
Nidus: Forma de nido.
Ejemplo: Asplenium nidus
Miniata: Miniatura.
Ejemplo: Clivia miniata
Officinalis: De uso medicinal.
Ejemplo: Salvia officinalis
Macrophyll: De hojas grandes.
Ejemplo: Hydrangea macrophylla
Benjamina: De hojas pequeñas.
Ejemplo: Ficus benjamina
Linearis: De porte colgante.
Ejemplo: Ceropegia linearis
Cylindrica: Hojas cilíndricas.
Ejemplo: Sansevieria cylindrica
Tomentosa: Hojas con tomentos (pelos cortos y suaves).
Ejemplo: Kalanchoe tomentosa
Macrorrhiza: Se reproduce por rizomas.
Ejemplo: Alocasia macrorrhiza
Japonica: Procede del Japón.
Ejemplo: Fatsia Japonica
Orientalis: Procede de Asia.
Ejemplo: Hyacinthus orientalis
Ya hemos visto cuánta información podemos obtener de nuestras plantas solo prestando atención a sus nombres botánicos. Antes de pasar a indagar sobre su procedencia y hábitats naturales (esto será en el siguiente número de nuestra revista), es importante conocer su ciclo de vida porque esto nos dará una idea de cuánto tiempo podemos esperar que nos acompañen en nuestro jardín de interior y, por lo tanto nuestra relación con ellas. ¡No te pierdas la siguiente entrada en nuestra web!
BIO
También conocida como Eva HappyVerde en su faceta de terapeuta hortícola, es también veterinaria. Es directora de Plantas para la vida, es además cofundadora de la Asociación Española de Horticultura Social y Terapéutica.