Quién no tiene la imagen de una buena ensalada de pepino solo o con tomate, o del mediterráneo gazpacho que disfrutamos en verano, una ensalada griega o una crema fría. Para tener ingredientes naturales, de calidad y que puedes cultivar tú mismo, te recomendamos empezar ahora con el precultivo del pepino. Pero, atención: es muy importante preparar bien la tierra de tu huerto y usar un substrato adecuado.
El pepino (Cucumis sativus) es una hortaliza termófila ideal para el cultivo previo en invernadero. Es originario de la India, donde se cultivaba hace más de 4.000 años. Hoy en día, es una de las hortalizas más populares del mundo y es especialmente apreciada por sus propiedades refrescantes. Los pepinos se componen de aproximadamente un 95% de agua, tienen pocas calorías y aportan componentes valiosos como la vitamina K, la vitamina C, potasio y sustancias vegetales de efecto antioxidante.
Empieza a cultivar ya los pepinos
El precultivo de pepinos puede iniciarse en enero o febrero, ya que las plantas necesitan unas 6-8 semanas antes de poder ser trasladadas al campo abierto o a un invernadero más grande. Los pepinos germinan mejor a temperaturas entre 20 y 25 °C. Se recomienda un lugar luminoso, por ejemplo, en el alféizar cálido de una ventana o en un invernadero con calefacción. Las semillas se siembran individualmente en pequeñas macetas con un substrato para la siembra pobre en nutrientes, a unos 1-2 cm de profundidad.
Usa el sustrato más adecuado
El nuevo substrato Professional Lightmix, de Floragard, es ideal para ello. No solo tiene una estructura fina, sino que también está óptimamente abonado y contiene el tónico natural Trichoderma: un hongo que cubre las raíces como si de una película protectora se tratara, haciendo que las plantas sean más robustas. Además, la perlita blanca de roca volcánica garantiza una buena permeabilidad del suelo. Esto permite que llegue mucho oxígeno a las raíces y evita el encharcamiento.
El substrato debe mantenerse siempre ligeramente húmedo. Los pepinos son sensibles al frío, por lo que las temperaturas no deben bajar de 18 °C por la noche. Las primeras plántulas aparecerán al cabo de unos 7-10 días. En cuanto las plantas estén lo bastante fuertes, pueden trasplantarse a un substrato rico en nutrientes.