Elige el que mejor te conviene
Según sea tu jardín, y según la superficie a regar, así deberás emplear un método u otro. Por ejemplo, para espacios reducidos lo mejor es el riego por goteo, que se suministra en la base de las plantas y mantiene una humedad constante. El riego por difusión pulveriza el agua directamente sobre los ejemplares. Para el césped, conviene el riego por aspersión, capaz de llegar a todas partes en una gran superficie. Y, para situaciones puntuales o de emergencia, la manguera o, incluso, la regadera que usas para las macetas.
LAS CLAVES
El riego manual
manguera, regadera o pulverizador. Es el más sencillo y económico entre todos los sistemas de riego, ya que no requiere una instalación previa, aunque solo resulta idóneo para regar espacios pequeños. En el caso de usar manguera, conviene elegir un modelo hecho con un material que no se doble pinzando la goma y no interrumpa así el riego.
El riego automático
programador de GARDENA
Es el más cómodo y eficaz, sobre todo al regar superficies bastante extensas. Permite programar el día y la hora de riego, por lo que vale para ausencias prolongadas. Solo es necesario instalar un programador eléctrico o a batería. Los actuales sistemas inteligentes con sensores repartidos por diferentes zonas del jardín permite además gobernar el sistema de forma remota o totalmente automatizado de manera que solo riega cuando realmente es necesario.
El riego por goteo
ahorrar mucho agua, ya que cae gota a gota y puede dosificarse de manera que cada planta obtenga solo la que realmente necesita en cada momento. Consiste en unos tubos de goma o plástico duro con orificios, colocados a ras de suelo y gobernados por un programador. Es ideal para setos, para un macizo o el riego de los ejemplares de la terraza.
El riego por aspersión
a la lluvia y es el mejor sistema para una gran extensión de césped, normalmente a partir de 6 m, que es su radio de alcance (dependiendo también de la presión). Su instalación requiere diversos aspersores, que emergen con la presión del agua y que deben colocarse de manera estratégica para que se solapen, para que ninguna zona quede sin líquido. También los hay móviles, que se acoplan al extremo de una manguera y se pueden ir colocando donde se necesiten.
El riego por microaspersión
Microdifusor de Leroy Merlin.
Es perfecto para los terrenos en pendiente, ya que hidrata las plantas sin que se produzcan regueros. Consiste en unos pequeños pulverizadores adosados mediante un microtubo e instalados sobre unos elevadores clavados en el terreno. También es una solución ideal para regar parterres y macizos.
El riego por difusión
difusores son parecidos a los aspersores pero más pequeños y siempre son emergentes. Resultan más adecuados para regar los macizos de flores o zonas más estrechas. Se trata de aparatos fijos, con un radio de acción de entre 2 y 4 metros y que rocían el agua. El alcance se puede modificar abriendo o cerrando un tornillo que llevan muchos modelos en la zona superior.
