Senderos… a tu paraíso

Partiendo de la base de que los senderos anchos abren el jardín a las vistas, mientras que los estrechos lo hacen más íntimo, ahora te damos algunas claves para que diseñes el camino perfecto para tu terreno.

Tanto si estás diseñando el jardín como si estás haciendo mejoras, no solo tienes que pensar en las especies, también es importante la división del terreno en zonas. El camino que las una debería ser fácilmente transitable por dos personas, y si optas por un sendero sinuoso, al menos que calcula que quepa una carretilla. Además, deben ir en consonancia con la vivienda. Una buena idea es dibujar un plano, lo más exacto posible, y ubicar en él las zonas verdes y si hubiera otras, como las de juego, parterres de flores, arbustos, pérgolas, bancos, farolas…

Mil y una sendas

Los senderos construidos con formas geométricas dejan ver el jardín con claridad y se integran en la arquitectura de la casa. Los sinuosos dan la impresión de que no se han planificado, que han sido creados por la naturaleza. Ambos tienen su atractivo y la elección depende también del estilo de la casa y del gusto de sus habitantes.

Por otro lado, los caminos rígidos con revestimientos lisos inducen a pasar de una zona a otra y los informales invitan a pasear disfrutando del recorrido, sobre todo si de vez en cuando se ensanchan. Y si lo que quieres comunicar es una zona de huerto, lo más práctico es un camino sencillo y recto.

Los materiales

Aquí también hay variedad. Los ladrillos permiten mil combinaciones gracias a su forma simétrica y a la exactitud entre ellos. Con ellos se pueden crear todos los dibujos que se te ocurran. En general, los materiales de construcción prefabricados te permitirán crear caminos útiles, ordenados y sobre todo limpios y fáciles de mantener. Los de césped, son fáciles de obtener y mantener en regiones de la cornisa cantábrica, o en el Atlántico andaluz. En el resto, mejor decántate por otros. Si acaso con enlosados tipo huellas en el césped, que no tienen límites laterales y están entroncados en el terreno. Por otro lado, también puedes optar por la madera, pero ten en cuenta que tiene menor resistencia al paso del tiempo. Elige en este caso maderas nobles, como la teka o el iroko, que no precisan mantenimiento.

BUENAS IDEAS

• Elige materiales adecuados al clima que van a soportar, principalmente aquellos que no se agrietan con el frío.
• Respeta las texturas y los colores de la zona, e intenta que combinen con la fachada de la casa y el estilo del jardín.
• Calcula la cantidad de materiales que necesitas, el desarrollo del vial e incluso el desnivel a salvar.
• Para romper la uniformidad de un pavimento de baldosas, levanta de vez en cuando una pieza y planta alguna especie vegetal.
• No descartes realizar uniones con césped, pero procura que no crezcan hierbajos. También te pueden venir bien las vivaces tapizantes.