¿Sabes qué es el descanso invernal? Se entiende por reposo vegetativo o descanso invernal el estado biológico de actividad metabólica mínima, durante el cual cesa el crecimiento. Excepto las anuales y algunas tropicales, todas las plantas necesitan un periodo de descanso más o menos prolongado, por lo general cuando termina la floración. Este descanso favorecerá un follaje fuerte y saludable, menos propenso a las enfermedades. Para que sea todo un éxito, te damos algunas claves:
- Para las especies de interior, es preferible buscarles un lugar sin calefacción o, si la tiene, proporcionarles una buena humedad ambiental colocando las macetas sobre una superficie con guijarros y agua. Una planta en reposo es incapaz de absorber el abono, así que suspende las aportaciones. El aporte de fertilizantes solo causaría la intoxicación del sustrato o del terreno.
- El exceso de riego es tal vez el mayor de los peligros. Ve reduciendo el aporte de agua hasta suspenderlo por completo. Dentro de casa puedes agruparlas junto a una ventana para que creen un microclima.
- Si puedes usar mantillo, que sea un buen abono orgánico de descomposición lenta. Pero aplícalo como un simple acolchado de protección. No te excedas con la cantidad, porque las consecuencias para tus plantas serán perjudiciales.
- Aunque en esta época las plagas y enfermedades no constituyen un problema grave, no bajes la guardia dentro de casa, en ambientes muy resecos podrían aparecer cochinillas, moscas blancas e incluso pulgones y arañas rojas. Al menor síntoma, utiliza un producto doméstico adecuado. • También podría haber peligro de botritis o pudrición, si no has suspendido el riego del todo. Elimina cualquier rastro de enfermedad en las hojas enseguida para evitar que se extienda.
- Esta época es la mejor para podar, pero solo de forma ligera. Unos pequeños recortes que reduzcan el follaje impedirán que las plantas permanezcan activas.
- En la poda, puedes eliminar un tercio del volumen foliar y conseguirás así acelerar la ramificación y permitir la entrada de la luz hasta los brotes y tallos más ocultos.
• En el césped te recomendamos siegas esporádicas para mantenerlo a una altura homogénea; riegos espaciados, siempre que no llueva y un recebo de mantillo orgánico que lo protegerá de las bajas temperaturas. En cambio no apliques a la pradera abonos minerales. Tampoco la escarifiques, ni la pinches, no le viene nada bien.
• Cuando están en periodo de latencia, la reacción de las plantas es distinta entre unas y otras. La mayoría conserva las hojas pero deja de florecer, otras dejan de crecer… pero todas, si las has tratado como te hemos indicado, volverán a crecer en primavera.
• Ante los primeros signos de que el periodo de descanso está llegando a su fin (como puede ser el desarrollo de nuevo follaje o incluso que aparezcan capullos de flores), es importante que incrementes el riego, pero sin pasarte, y que reanudes el abonado.
• No todas las plantas paralizan su actividad en invierno. Algunas florecen ahora como la flor de Pascua, el brezo, la azalea, el espatifilum, el ciclamen… En estos casos sigue regándolas y abonándolas para disfrutar de ellas durante más tiempo.
